11- La Nana, tenía una tienda en la esquina bajando a Casa Ayala, era muy popular y muy querida y respetada, llegué a ver con ella a una hermana, allí los niños comprábamos chuflas, caramelos, golosinas, despachaba copas, tenía una tienda muy peculiar, a veces tenía una gallina suelta que picoteaba de los desperdicios, como lo hacían los bares con los perros (nuestra generación lo recuerda) cuando era mayor y vivía sola iba a buscarla Maruca su sobrina casada con Manrique y si no venía con Antonio y Óscar, recuerdo verla siempre con una lechera. Al morir la cerraron quedando los restos dentro de estanterías, mostrador que se fue ( en mi recopilación (Tiendas y bares de Tenoya ) se amplía más información.
12- Pepito Guerra, fue mayordomo de la finca de Arebas, recuerdo que traía una lechera grande cargada en los hombros cubierto con un saco de papas vacío para evitar los filos del fondo de la lechera, así todos los días, esperando en la carretera que pasara la camioneta, aunque vendía al que quisiera por el camino.
Vivía en la bajada del Camino a Casa Ayala, donde hoy vive Marcelino Guerra
13- Carlitos, trabajaba con Bañu que era un exportador de plátanos, Carlitos depositaba los racimos en el cuarto de la familia Juan Rosa, frente al lateral de la ermita, subiendo el camino de la Heredad, cuarto que se utilizaba para las fiestas, como bar y tómbolas, Carlitos, tenía un hijo soltero, se llamaba Manuel, muy amigo de Manolito el zapatero y se echaban las copas en la tienda de Evangelina, una hija de Carlitos se casó con Fajardo y vivían en la casa con balcón que da a la ermita, desde ese balcón Don Florencio predicaba cuando regresaba la Virgen de la procesión.
14- Pepe el Palanca, trabajaba en el muelle, siempre vestía de gris, era un poco jorobado o carpetudo, cuando se tomaba las copas, le daba por cantar ópera y hablaba peninsular, tenía que recuerde dos hijos varones y dos hembras, vivía en la bajada Camino a Casa Ayala en la segunda casa.
15- Lorenza la loca era tía de Guadalupe, Manola y de Pepe la gata, vivía detrás de la tienda de Nana, era muy coqueta, presumida y muy limpia, siempre llevaba una flor en el pelo, no hablaba con nadie ni molestaba, paseaba por la carretera general.
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